Jesús


El Hijo del Hombre, ¡qué gran denominación!

Eso es lo que fue, un Dios hijo del hombre.

Era, como digo, hijo carnal de María, la de las palomas y de José, el carpintero y contratista de obras.
Esta afirmación es polémica, por cuanto que la iglesia afirma que fue Dios el que concibió a Jesús. Pues bien, ¿por qué iba a ser distinto de los demás, si precisamente, Jesús vino a experimentar plena y únicamente la Vida terrenal?
El Arcángel Gabriel anunció a Maria que concibiría un hijo, al que debería llamar Jesús. No fue hasta la adolescencia cuando Jesús fue tomando conciencia de quien era realmente, culminando con la extraordinaria simbiosis del Hombre y el Dios en las cumbres del Hermón.

Vino a proclamar la esperanza y a Vivir la experiencia del tiempo y del espacio, necesario para poder ser proclamado oficialmente príncipe de su creación.

Obviamente, me estoy dejando infinidad de detalles que vienen a confirmar lo relatado. Sólo aportaré una nueva novedad, Jesús nació el 21 de Agosto del año -7
Verano, como es lógico, nadie en la época se atrevía a viajar por Israel en la época de las lluvias y los fríos.

Pero, como digo, hay muchas cosas que no es posible relatar en este fragmento.

Brindemos por Él, como decía:

¡Lehaim! ¡Por la Vida!

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