La Existencia


Capítulo once, me sorprende verme todavía escribiendo estas reflexiones, tenían razón, esto engancha…

Hoy voy a reflexionar sobre nuestra existencia y sobre el por qué de la misma.

Creo que existimos porque en algún momento hemos sido imaginados, cada uno individualmente, cada uno en su tiempo y en su marco individual.

El Padre, nos imagina, aparecemos, firmamos el contrato y somos lanzados a la gran aventura que es vivir. Podemos o no acertar, podemos ser más o menos perfectos, pero eso no es lo importante, ¿Si Dios quisiera que el mundo fuera perfecto, gatearían los bebés, tendríamos que aprender de nuestros errores? Más aún, ¿haría falta vivir? Vivir es experimentar la imperfección, aprender de ella y de nosotros mismos, asomándonos a nuestro interior y descubriendo las respuestas que no solemos advertir, pero que, sin embargo, están ahí, esperándonos sin prisas.

No seré yo quien trate de desvelar los misterios de Dios, no somos capaces, sin embargo nos basta con confiar, Él sabe guiarnos y a todos, todos, nos llegará nuestra hora en la que comprenderemos.

Dejarse llevar en las manos del Padre es una gran aventura, verdaderamente todo adquiere un nuevo sentido, un maravilloso y mágico sentido.

Verdaderamente, con nuestra existencia, damos pie a la verdad, de no existir nada más allá de nuestra percepción, ni siquiera estaríamos aquí, ni tú leyendo, ni yo escribiendo.

No lo he mencionado, pero desde hace un mes me acompaña una extraña seguridad, una increíble seguridad e inspiración que me llena cada vez que escribo. ¡Quién sabe! Lo mismo estas reflexiones me sirvan a mí o a los que me rodean en un futuro…

Cierro este capítulo aquí, no conviene abusar del Padre (o bisabuelo…)


2/01/08

Posted by Unknown |

0 comentarios: